It hurts.

Dicen que a través de las palabras, el dolor se hace más tangible. Que podemos mirarlo como a una criatura oscura. Tanto más ajena a nosotros cuanto más cerca la sentimos. Si uno de estos pequeños granitos enferma, el resto del organismo enferma también. Pero yo siempre he creído que el dolor que no encuentra palabras para ser expresado es el más cruel, más hondo… el más injusto.

jueves, 26 de julio de 2012

¿Quién no se ha vuelto loco alguna vez?


¿Quién no ha perdido la cabeza alguna vez? Quién no se ha vuelto loco entre tanto sueño fracasado. No todos hemos sido capaces de creer nuestras propias historias para aliviar, sólo para aliviar. Y además las palabras son inversamente proporcionales a todo lo que queremos decir. Quizás por eso no te he dije ayer que te quería sin márgenes de seguridad. 
¿Quién no ha perdido la cabeza alguna vez? Quién no ha tenido indicios de esquizofrenia y se ha inventado momentos que nunca existieron para aliviar, sólo para aliviar. O ha creído que las letras de las canciones hablaban de su historia sin pedir siquiera derechos de autor sentimental. 
¿Quién no ha perdido la cabeza alguna vez? Quién no ha sufrido resaca por dejarse el corazón en el fondo de alguna jarra con cerveza para aliviar, sólo para aliviar. Pero maldita cerveza. Que sólo me ofrece flashes de la noche anterior, y tampoco me deja acabar el sueño que empecé porque tanto dolor de cabeza evita que me vuelva a dormir.



¿Quién no se ha vuelto loco alguna vez?
¿Quién no ha perdido la cabeza alguna vez? 

¿Quién?

No hay comentarios:

Publicar un comentario